Reubican a sacerdote de Tetelcingo

* Pese a oposición de feligreses que lo mantenian resguardado
* Desierta lucio la parroquia este domingo
* Pobladores se fueron a Santa Rosa 30 a acompañar al padre Jose Luis Alvarez



Tristeza, frustración, enojo, toda una mezcla de emociones encontradas prevaleció este domingo en la comunidad indígena de Tetelcingo, luego de que un día antes el párroco José Luis Alvarez Ramírez, quien durante 29 años fue su guía espiritual fue cambiado de parroquia a la comunidad de Santa Rosa 30 en el municipio de Tlaltizapan.

En la iglesia de San Nicolás de Bari, había pocas personas, debido a que la mayoría del pueblo se fue a Santa Rosa 30 a “acompañar en su primera misa” a su sacerdote, al cual no se resignan a perder.

En la misa de este domingo donde estaba programado realizar bautizos, no llego el nuevo párroco Severo Avilés, por lo que la comunidad pidió la presencia del sacerdote de Oaxtepec para llevar a cabo la celebración religiosa. “Del nuevo sacerdote no sabemos nada”, señalan.

La sensibilidad que existe en la comunidad provoca que la presencia de elementos de la policía municipal que realizan patrullajes en el pueblo, sea considerada un acoso, una provocación, “que quieren al mandarnos a la policía, así quieren imponernos al nuevo padre, desde las 6:00 de la mañana llegaron varias patrullas, hace rato durante la misa patrullas y motociclistas rodearon el tempo, porque?”, se preguntan.

Y es que los habitantes de esta comunidad étnica se habían encariñado con el sacerdote José Luis Alvarez Ramírez, pues aseguran que durante mas de 29 años supo entender sus costumbres y tradiciones, “siempre que lo buscábamos, fuera la hora que fuera el nos atendía”, apuntan.

Quienes se mantienen de guardia en la iglesia, manifestaron que el sábado por la tarde llego el vicario de la diócesis de Cuernavaca a entregar la notificación para que el padre José Luis se presentara a partir de este domingo en el poblado de Santa Rosa 30. Para evitar un conflicto “el padre nos suplico que lo dejáramos ir, pero todo el pueblo se fue a ver donde iba a llegar y para acompañarlo en su primera misa”, señalan.

Ante la negativa para que les dejaran al sacerdote, la comunidad exigió que se firmara una minuta en donde exigen que si el nuevo párroco que llegue no responde a sus necesidades lo cambiaran y de preferencia piden se les regrese al padre Alvarez Ramírez.